1. Estabilidad financiera total
Se produce habitualmente en el momento de la creación de la empresa. Situación de máxima estabilidad financiera ya que todo el activo se financia con fondos propios (no hay deudas).

Hay un exceso de financiación propia y la empresa no se puede beneficiar del efecto positivo del endeudamiento.

¿Qué hacer?
  • Endeudarse moderadamente para aumentar la rentabilidad.
2. Estabilidad financiera normal
La empresa, en el desarrollo de su actividad, se endeuda para dotarse de una mayor estructura económica que le permita ampliar su capacidad de actuar en el mercado.
El activo se financia con fondos propios y ajenos.

La empresa tiene un fondo de maniobra positivo: con su activo corriente puede liquidar todas sus deudas a corto plazo y aún dispone de un margen de seguridad que le da seguridad y estabilidad a corto plazo.

¿Qué hacer?
  • Vigilar que el fondo de maniobra sea el necesario para asegurar el funcionamiento de la actividad.
3. Desequilibrio financiero a corto plazo. Suspensión de pagos.
La empresa tiene dificultades para pagar deudas a corto plazo. El pasivo corriente es mayor que el activo corriente (el fondo de maniobra es negativo). Está cerca de la suspensión de pagos.

Las causas pueden ser: (1) disminución de ventas; (2) aumento de las deudas a corto plazo; (3) una mala planificación financiera; (4) dificultades en el cobro a clientes…

¿Qué hacer?
  • Ampliar el plazo de pago a proveedores y/o acreedores.
  • Planificar mejor su tesorería.
4. Desequilibrio financiero a largo plazo
La empresa no tiene fondos propios por las pérdidas acumuladas de ejercicios anterioes (se ha descapitalizado). Todo el activo se financia con pasivo (deuda). Si siguen acumulándose las pérdidas, el patrimonio neto puede llegar a ser negativo. Las deudas exceden al activo.

La empresa no tiene capacidad de hacer frente a las deudas a largo plazo. Está en quiebra técnica: estado de insolvencia total.

¿Qué hacer?
  • Aplazar pago de la deuda.
  • Convertir acreedores en socios
  • Vender activos
  • Aumentar capital.
La otra solución es liquidar la empresa.
Concurso de acreedores
Procedimiento judicial que pretende evitar la quiebra y reorganizar la gestión de una empresa insolvente para que vuelva a ser viable y que los acreedores recuperen la mayor parte de sus deudas.
El concurso puede ser:
  • Voluntario (lo solicita la empresa)
  • Necesario (lo solicita un acreedor).
Una vez declarado el concurso, por un juez, se suspenden todos los pagos y no corren los intereses de la deuda. El juez toma las riendas de la empresa y delega en unos administradores. Los pasos siguientes, son:
  1. Evaluación de la situación de la empresa
  2. Solución del proceso: convenio de acreedores (acuerdo con acreedores) o liquidación de la sociedad.
Fuente
www.econosublime.com
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